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SUSCRIBIRSEEste artículo es parte de la edición de marzo, 2018
ALTIBAJOS
Un año más, febrero nos ha demostrado que, para la avicultura, es un mes de altibajos que, al menos en lo referente al mercado del pollo, no tienen la más mínima lógica, como tampoco las grandes diferencias que a veces se producen entre los tipos blanco y amarillo.
En este mercado, concretamente, febrero se inició con una tímida alza del pollo amarillo, igualándose en sus precios al blanco, aunque pronto le sobrepasaría, sin variación ya entonces hasta el fin de mes. Mientras, el tipo blanco, que había cedido posiciones a fin de enero, volvía a remontar hasta en dos semanas consecutivas, permaneciendo firme hasta finalizar el mes.
En comparación con los precios del mismo período del año pasado, obsérvese nuevamente esta dicotomía entre los dos tipos, prácticamente igual el blanco y muy por encima el amarillo, una diferencia que creemos no está justificada por su ligeramente superior coste de producción.
Mientras tanto, en el huevo ninguna sorpresa, como ya cabía esperar tras las fuertes cesiones de precios del pasado enero. Pues ahora, tras unos ligeros reajustes a la baja en la primera quincena de febrero, luego ha ocurrido lo contrario en la segunda, observándose incluso una cierta tendencia al alza al finalizar el mes.
También aquí, la comparación con el mismo período del año pasado resulta favorable al actual, con una diferencia a su favor del orden de más de un 25 % en los precios de lonja … aunque estos no sean reflejo de los que luego vemos en los comercios, mucho más heterogéneos hoy que en el pasado por la amplia variedad de tipos de producción con los que nos encontramos.•