Llegando ya con este número a final de año, a la par que felicitar a nuestros lectores por las pasadas Navidades y con nuestros mejores deseos para el 2023, queremos hacer una reflexión sobre nuestro sector y los retos con los que se enfrenta.
Sin embargo, y no sin un falso orgullo, a través de una rápida revisión del índice del año, que se inserta al final de este número, queremos dejar constancia de lo aportado por SELECCIONES AVÍCOLAS para conocimiento de nuestros lectores: ¡alrededor de 300 artículos, entre los de divulgación o de investigación y las noticias relacionadas con la avicultura! .
Con ello intentamos mantenerles informados de todo lo que está ocurriendo en un sector tan dinámico como es el avícola, valiendo como ejemplo el que, si bien el conjunto de titulares de la sección de noticias ha representado alrededor del 50 % del total de los incluidos en la revista a lo largo de este año (unos 300), en extensión son solo el 10 % …. lo que se explica por nuestra decisión de resumirlas en lo posible.
Pero aun habiendo dicho esto, a lo que añadiríamos que los logros conseguidos en materia avícola son impresionantes, en cuanto a los avances de la genética y la alimentación especialmente, para producir unos pollos con una velocidad de crecimiento impresionante y unas gallinas con una vida productiva cada vez más larga, si nos paramos a reflexionar sobre los retos que tenemos pendientes no podemos dejar de preocuparnos. Como muestra, ahí van algunos de los que serán motivos de estudio en el futuro:
El primero (a nuestro juicio sin duda alguna), el hallazgo de alguna vacuna ante la grave situación creada a nivel mundial por la influenza aviar de alta patogenicidad que, en su propagación, no reconoce fronteras.
En Europa, principalmente, la resolución de los problemas relacionados con el bienestar de las aves, con prioridad en el sacrificio de los machitos de las líneas de puesta y la posible vía de un sexaje in ovo o de otros métodos.
En el sector del huevo, profundizando en el estudio de las formas de lograr una más larga vida productiva de las gallinas y sin que ello repercuta en la calidad del huevo.
En el del broiler, avanzar en los estudios para una mejora de la calidad del pollo, solventando los problemas creados por algunos defectos en la carne de la pechuga.
En la alimentación, reduciendo la dependencia de la soja mediante la utilización de otras fuentes proteicas alternativas, simultáneamente con una mayor utilización de los aminoácidos de síntesis, en detrimento de la proteína.
Y con un largo etcétera, para indicar que nuestra relación de “peticiones” no se acaba aquí, una consideración final es la de recordar que hoy vivimos en una sociedad que está cambiando muy rápidamente, con un importante reto en la sostenibilidad, que hemos de aceptar en lo que nos afecta en la avicultura.
Real Escuela de Avicultura