Este artículo es parte de la edición de abril, 2022

El volteo de la cama, como práctica de manejo (III)

Efectos del volteo en la concentración de amoníaco

La concentración de amoníaco (NH3) en el gallinero puede ser perjudicial para la salud de los pollos y de las personas. Se recomienda que se mantenga por debajo de 10 a 25 ppm, dependiendo del estándar y la jurisdicción. Una alta concentración de NH3 puede reducir el rendimiento de las aves, aumentar la susceptibilidad a las enfermedades e incrementar la mortalidad. Las prácticas de manejo en cuanto a la ventilación y el manejo de la cama, especialmente reduciendo el contenido de humedad de la misma, juegan un papel importante en la concentración de NH3 de las naves, pero ¿cómo afecta el volteo a ello? Hay muy poca información publicada que se centre directamente en los impactos de volear la cama sobre la concentración de NH3. Esto se ve afectado por múltiples factores, como son la cantidad de NH3 producida en la cama (a su vez afectada por la alimentación de las aves, la temperatura, la producción de deyecciones y el contenido de humedad) , la cantidad de NH3 intercambiado entre la cama y el aire, el volumen de aire fresco aportado por la ventilación y el del extraído de la nave.  

EL VOLTEO DE LA CAMA NO AFECTA DIRECTAMENTE A LA DILUCIÓN O ELIMINACIÓN DE NH3 POR EL SISTEMA DE VENTILACIÓN, PERO ALTERA LAS CONDICIONES DE LA YACIJA, AFECTANDO A LA FORMACIÓN Y EMISIÓN DEL MISMO.

 

Cómo ya hemos visto, el volteo de la cama, al trocear la misma, aumenta el área de la superficie de emisión, lo que también incrementa el potencial de generación de NH3, liberando el atrapado debajo de la superficie apelmazada, lo que mejora su friabilidad y permite a los pollos continuar el intercambio de materiales al mismo tiempo que en la superficie de la cama, aumentando también el intercambio de amoníaco y humedad entre la cama y el aire.

Las emisiones aceleradas de humedad, gas y partículas de la cama tienen lugar en el momento del volteo debido al aumento de la superficie y los posibles sitios de intercambio de las moléculas de agua y otros compuestos. La aireación de la cama también promueve la actividad microbiana aeróbica y la producción de calor que aumenta aún más la volatilización del vapor de agua y promueve la descomposición microbiana del ácido úrico en la misma, que es una de las fuentes reconocidas para la producción de NH3. Además, se ha demostrado que la aireación a largo plazo de la cama reduce las emisiones de producción de NH3. Mientras, la rápida evaporación del agua proviene del volteo, a corto plazo, el contenido de humedad de la cama sigue siendo elevado y continúa apoyando la producción de NH3. Por otra parte, se ha informado que la producción de NH3 tiene lugar cuando el contenido de humedad de la cama es tan bajo como 20%, pero aumenta sustancialmente al ascender la temperatura hasta 18 ºC, con una humedad del 27 al 40 % y aún más con un 51 % de humedad y una temperatura de 40 ºC.  

ESTO SIGNIFICA QUE LA CAMA DEBE ESTAR MUY SECA PARA PODER RESTRINGIR SIGNIFICATIVAMENTE LA PRODUCCIÓN DE AMONÍACO.

El volteo de la cama puede ayudar con el secado de la misma, aunque el manejo de la humedad en el gallinero tendrá el mayor influencia sobre el mantenimiento de una cama seca. En la producción comercial, el voleado de la cama produce un máximo de NH3 al aumentar el potencial de generación del mismo o al liberar el que quedó atrapado debajo de la superficie. Se requiere una ventilación efectiva y una baja humedad para acelerar la pérdida de agua y la salida de NH3 para lograr una reducción de éste a largo plazo.

Sin embargo, es posible que una estrategia de manejo de la cama que incluya un volteo regular de la misma pueda contribuir a reducir las concentraciones de NH3 a largo plazo y evitar un máximo durante la operación, ya que se ha demostrado que una aireación constante produce una cama más seca y reduce la liberación de NH3. Nosotros creemos que es probable que el volteo regular de la cama sea beneficioso desde la perspectiva del NH3 ya que ello ayuda a secarla, así como a mantenerla en un estado en el que los pollos puedan trabajarla con un apelmazamiento mínimo, aunque suponiendo que la humedad se mantenga baja y la ventilación sea efectiva para eliminar el agua de la cama y la nave. Sin embargo, se necesita investigación adicional para comprender cómo interactúa el volteo de la cama en el entorno de la nave y de los pollos.  

 

Efectos de la cama sobre la salud y el bienestar

Mantener una cama «seca y friable», y evitar la humedad puede reducir los posibles problemas de salud y bienestar de las aves. Así, la legislación y las normas de bienestar animal especifican la calidad de la cama y las condiciones que deben mantenerse durante toda la producción y la Directiva Europea establece que «todos los pollos tendrán acceso permanente a una cama seca y friable en su superficie«, mientras que, en Australia también hay diversas normas a este respecto. En general, se requiere que la cama sea adecuada para la especie animal y de buena calidad, que tenga un riesgo mínimo de ser contaminada con agentes tóxicos y que se maneje para evitar el apelmazamiento excesivo, el polvo y una humedad que afecte al bienestar de los pollos. Sin embargo, si bien estas normas especifican los objetivos de mantener un cierto nivel de calidad de la cama, no concretan las acciones o estrategias que deben emplearse para lograr las condiciones requeridas.  

EL ESTADO DE LA CAMA NO ES FÁCIL DE EVALUAR PUES INCLUYE MUCHOS ASPECTOS DIFERENTES, INCLUIDO EL CONTENIDO DE HUMEDAD, LA FRIABILIDAD, LA PEGAJOSIDAD, EL CONTENIDO DE ESTIÉRCOL, EL pH, LA ACTIVIDAD Y LA DIVERSIDAD MICROBIANA, EL TAMAÑO DE LAS PARTÍCULAS, EL APELMAZAMIENTO (Y SU ESPESOR) Y LA TEMPERATURA, POR NOMBRAR ALGUNOS.

Para estandarizar el proceso, se ha intentado desarrollar y aplicar procedimientos de puntuación a fin de ser utilizados para relacionar la calidad de la cama con los resultados de bienestar. Los procedimientos de puntuación tienden a centrarse en la humedad percibida, la friabilidad, la pegajosidad, el apelmazamiento y la proporción de cama húmeda y en mal estado en relación con la seca y friable. Todas estas propiedades y sus relaciones comprobadas con los resultados de bienestar apoyan la hipótesis de que el estado de la cama guarda relación con el bienestar animal. El propósito de nuestra revisión no es centrarse en el efecto de las condiciones de la cama en el bienestar de los pollos, sino en los aspectos de su volteo que pueden afectar a la salud y el bienestar de estos.

El efecto de las condiciones de una cama húmeda y apelmazada ya se han comentado, aumentando los riesgos de dermatitis de contacto (incluyendo quemaduras de tarsos, dermatitis plantares y vesículas pectorales), así como los relacionados con infecciones microbianas y patógenos y la pérdida de sus propiedades aislantes.

Todo ello no solo causa problemas de salud y bienestar, sino que también pueden originar más “segundas” en el matadero. Pero una cama excesivamente seca también puede causar problemas relacionados con el polvo, con los correspondientes problemas respiratorios o oculares. El objetivo es proporcionar una cama friable que no esté ni húmeda ni excesivamente seca como para impactar en el bienestar, al mismo tiempo que pueda ser trabajada por las aves para apoyar la descomposición aerobia de las deyecciones y permita que estas escarben en ella y se bañen en el polvo. Las preguntas que nos planteamos son qué contribución tiene el volteo de la cama en estos objetivos y hay aspectos de ello que tienen sus propios riesgos en términos de bienestar y salud animal. Nuestra encuesta a los productores de pollos para carne australianos ha mostrado que las preocupaciones por el bienestar (según lo sentido por ellos) eran la segunda razón más importante que impide el acondicionamiento de la cama (el 67% de las respuestas).

La encuesta no preguntó cuál era la preocupación específica por el bienestar (por ejemplo, un aumento de NH3, el polvo adicional, lesiones resultantes del miedo al manejo de maquinaria); aunque dos de las principales cosas que habían impedido el volteo de la cama habían sido la densidad de población (el 88% de los encuestados) y la edad y/o el tamaño de los pollos (el 49% de los mismos). Nosotros creemos que estas respuestas estaban vinculadas y que a los productores les preocupaba principalmente el trabajar con una maquinaria en naves muy pobladas por un posible impacto negativo en el bienestar animal. Nuestra creencia se ve respaldada, además, por los comentarios de varios productores que aprovechan el menor número de aves después de un clareo, una práctica habitual en Australia para retirar una parte de los pollos (hasta la mitad de la manada) para su sacrificio, entre 30 y 35 días de edad, para realizar el volteo de la cama.

Esto sugiere que los aumentos de polvo y NH3 son una menor preocupación que el operar con maquinaria cuando la densidad de población es elevada pues a pesar de la preocupación de los productores sobre el empleo de la maquinaria de volteo apenas hay bibliografía que relacione esta operación con la salud y el bienestar de los pollos.

   

Del estudio de esta bibliografía deducimos que las diferentes opiniones sobre las posibles implicaciones del volteo de cama en la salud y el bienestar de los pollos están relacionadas con el período de tiempo empleado en la operación, así como en el estado de la misma antes de iniciarla. Al considerar los aumentos repentinos en la concentración de polvo, Estellés y col. (2011) indican que el volteo de la cama causó un aumento en la concentración de polvo (PF10 y PM2,5) y su emisión durante la operación, aunque esta se disipó al cabo de unas 2 h. Y, por otra parte, en Australia hemos visto que a pesar de que las concentraciones de polvo son más altas durante el volteo de la cama, luego fueron generalmente inferiores que los estándares de exposición ocupacionales de trabajo para el polvo de madera blanda (5 mg/m3).

Por otra parte, se ha informado que el volteo de la cama no es recomendable debido al aumento en la emisión de NH3 que se origina durante y después del mismo, aunque algunos productores de pavos lo realizan para abordar problemas de camas húmedas (y presumiblemente apelmazadas). Así se manifiestan Santonja y col. (2017) con el fin de no aumentar las emisiones de NH3 y partículas, mientras que para abordar el aumento en la liberación de NH3 causado por el volteo Malone y col. (2017) sugieren que la aplicación de enmiendas a la cama que reducir elmismo es crítica y que si bien el volteo no es recomendable, al aumentar la superficie del material libera humedad y NH3 y ayuda a controlar el contenido de ésta a largo plazo. A pesar de la pérdida de agua debida al volteo de la cama, Nuñez (2011) no observó un efecto a largo plazo sobre su contenido en humedad, pero podría decirse que la cama fue más seca que la que se observa en condiciones comerciales. Nosotros creemos que la falta de efecto del volteo de la cama indicada en este estudio estuvo relacionada con la sequedad de la misma antes de la operación y pone de relieve la importancia de considerar las condiciones de la cama antes de la misma a fin de evaluar su efectividad y los riesgos potenciales que tiene.

Si bien la emisión de polvo y gases de la cama puede aumentar debido al volteo, la concentración interna puede no hacerlo necesariamente si se incrementa la ventilación para diluir las emisiones aéreas emitidas y expulsarlas de la nave.  

EL AUMENTO DE POLVO Y GASES POR EL VOLTEO NO ES DIRECTAMENTE UNA PREOCUPACIÓN PARA EL BIENESTAR ANIMAL SI SE MANEJA ADECUADAMENTE.

Sin embargo, el aumento indebido de la ventilación puede tener efectos adversos en el entorno de la nave en lo referente a la eliminación de calor y la energía, así como por la introducción de un exceso de humedad a través de unas entradas no controlados o bien por cambiar la circulación interna de aire a causa de una mayor humedad, cama más húmeda y más proporción de NH3 a largo plazo. Si bien concluyeron que las condiciones en sus pruebas estaban por debajo de los umbrales citados como potencialmente perjudiciales para la salud del pollo, observaron que el volteo de la cama contribuyó a una prevalencia ligeramente mayor de discondroplasia tibial, una mayor ingesta de pienso y una incidencia ligeramente mayor de casos leves de quemaduras de tarsos y conjuntivitis. Nuestras observaciones sobre las operaciones de volteo de la cama indicaron que los pollos regresaron rápidamente a la zona recién tratada, en la que escarbaron activamente y tomaron su baño de polvo. La cama apelmazada que existía antes de la operación se convirtió en una cama friable y la parte seca y polvorienta fue reemplazada por otra semihúmeda.    

POR TANTO, SUGERIMOS QUE LOS PRODUCTORES APROVECHEN LOS ACTUALES CONTROLES DE VENTILACIÓN QUE PUEDEN MONITOREAR LAS CONCENTRACIONES DE GAS CON SENSORES ESPECIALIZADOS (POR EJEMPLO, PARA EL NH3) Y CAMBIAR AUTOMÁTICAMENTE LOS CAUDALES DE VENTILACIÓN PARA FIJAR LAS CONCENTRACIONES DE GAS POR DEBAJO DE LOS UMBRALES REQUERIDOS.

Además del contenido de humedad de la cama, Nuñez (2011) y Villagrá y col. (2011) evaluaron el efecto del volteo de la cama en varias medidas relacionadas con la producción, la salud y el bienestar.

Las máquinas utilizadas para el volteo eran un tractor de 1,5 a 2,4 m de ancho. Basándose en las observaciones visuales de la cama que salía de la máquina, esta mezclaba eficazmente las partes húmedas y apelmazadas con las secas vecinas que se encontraban en su camino. Con información limitada sobre las posibles implicaciones para la salud y el bienestar del volteo de la cama, se sugiere que es un tema que debe investigarse más a fondo para comprender las posibles consecuencias y / o impactos que puede tener en la salud, el crecimiento y el comportamiento de los pollos. Además, se sugiere que las investigaciones deben considerar el efecto durante el volteo, inmediatamente después del mismo y los resultados a largo plazo. Las investigaciones también deben considerar las condiciones de la cama y las prácticas de manejo antes del volteo, teniendo en cuenta los posibles efectos sobre la salud y el bienestar de las aves.

 

 

Conclusiones

Mantener una cama seca y friable: es favorable para tener unas condiciones ambientales adecuadas en los gallineros y permitir a los pollos «trabajar» el material de la cama, lo que contribuye a unos buenos resultados de la producción. El volteo de la cama puede ser útil para ayudar a reducir la humedad de la misma al acelerar el proceso de secado y, a su vez, disminuir el riesgo de patógenos perjudiciales y el de polvo y gases presentes en el medio ambiente, aunque puede haber un aumento puntual potencialmente perjudicial de estos durante el volteo. Se requiere más investigación para impulsar el conocimiento actualmente limitado sobre los efectos del volteo de la cama y para proporcionar una mayor comprensión sobre los beneficios y los riesgos involucrados, incluidos los relacionados con los posibles aumentos puntuales de las concentraciones de NH3 y malos olores.

El mantener unas condiciones óptimas de la cama probablemente continuará siendo un reto continuo, especialmente cuando otros factores afectan en gran medida las condiciones de la misma, especialmente en cuanto a su contenido en humedad.

El volteo de cama es solo una de las muchas prácticas de manejo que los productores de pollos pueden usar para manejar de forma eficaz la calidad y las condiciones de la misma. La ventilación sigue siendo la herramienta principal para manejar las condiciones de la cama, pero el volteo puede ser una práctica complementaria para acelerar la pérdida de agua, suponiendo que las condiciones sean propicias y que los riesgos relacionados con unos posibles picos de NH3 se manejen adecuadamente.    

CLAIRE-MARIE PEPPER Y MARK W. DUNLOP Poultry Sci., 100: 101071. 2021  

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