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SUSCRIBIRSEEste artículo es parte de la edición de junio, 2019
B. Doupovec y col.
XV European Poultry Conf. Dubrovnik. Sept.2018
Como las aves domésticas son particularmente susceptibles a las micotoxinas, es imperativo monitorizar la prevalencia de las mismas en las primeras materias componentes de los piensos, al mismo tiempo que la contaminación con ellas a nivel mundial.
A fin de elucidar la amenaza de estos metabolitos tóxicos, nosotros hemos estado llevando a cabo anualmente una encuesta sobre micotoxinas durante casi 15 años, monitorizando la incidencia de diferentes micotoxinas en piensos acabados y en diferentes primeras materias empleadas en alimentación animal.
En el año 2017 hemos analizado 18.757 muestras recibidas de todo el mundo para las principales micotoxinas, de ellas 4.812 procedentes de Europa. Las micotoxinas analizadas fueron aflatoxina – AFLA -, zearalenona – ZEN -, deoxinivalenol – DON -, T-2 toxina – T-2 -, fumonisina – FUM – y ocratoxina- OTA – y los análisis se realizaron mediante cromatografía líquida acoplada en tandem a espectrometría de masas, cromatografía líquida de alta resolución y ELISA (*)
Resultados de los análisis
En base en las muestras en las que, como mínimo, se analizaron 3 micotoxinas, el 90 % de las muestras recibidas de Europa contenían, al menos, una de las seis micotoxinas investigadas. La DON fue la hallada más habitual, en el 65 % de todas las muestras, con una concentración media de 555 ppb, siguiéndola la FUM, en el 51 % de ellas, con una concentración de 7787 ppb, la ZEN, en el 44 % – 72 ppb – y la T-2, en el 33 % – 36 ppb.
La presentación de aflatoxina – producida por especies de Aspergillus – y la ocratoxina A – producida por especies de Penicilium y de Aspergillus – frecuentemente está relacionada con las condiciones de almacenaje de los granos, aunque también con daños producidos en éstos en el campo. La AFLA estuvo presente en el 16 % de las muestras – media de 6 ppb – y la OTA en el 24 % – a 8 ppb -.
Las tendencias en la presentación de micotoxinas en los cereales – maíz, etc. – y los piensos acabados fueron similares que las observadas en el conjunto de datos. Por ejemplo, en las muestras de maíz las DON y FUM fueron las micotoxinas más habituales, detectadas en el 72 % – con una media de 882 ppb – y el 73 % – media de 1506 ppb -, respectivamente. Además, la prevalencia de ZEN – con 40 % de muestras positivas -, de T-2 – 22 positivas – y AFLA – 22 % positivas –
fue más bien alta en las muestras europeas.
Los resultados de la investigación demuestran que las micotoxinas continúan siendo un serio motivo de preocupación en la producción agrícola y que debe aplicarse un programa eficaz de evaluación de riesgos para proteger a las aves de los peligros inherentes a las mismas.