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SUSCRIBIRSEEste artículo es parte de la edición de junio, 2017
Normas de bienestar para pollos y pavos
Bajo la influencia de diferentes regulaciones de bienestar, las condiciones de manejo predominantes divergen considerablemente entre países. La mayoría de las regulaciones proporcionan una densidad de población que se puede aumentar con unas buenas prácticas de manejo. La densidad básica de población de la UE es de 33 kg/m² pero bajo condiciones de manejo mejoradas pueden permitirse hasta 42 kg/m². No obstante, en algunos países las densidades máximas permitidas son inferiores a 42 kg/m². En Suecia, por ejemplo, la densidad básica de la población es de 20 kg/m², pero se permiten hasta 36 kg/m² cuando los criadores participan en un control en el cual el alojamiento y las aves son inspeccionados regularmente. La densidad de población máxima en Alemania es de 39 kg/m².
En Brasil no existe regulación para la densidad de población de los pollos, pero debido a la alta temperatura sólo se crían de 10 a 12 pollos/m2, aproximadamente 35 kg/m². Tampoco hay límite de densidad de población en EE.UU. pero las recomendaciones de varias organizaciones de productores varían de 32 a 42 kg/m². En la producción ecológica, la densidad de población máxima es generalmente más baja que en la convencional: 21 kg/m² en la UE, Canadá y Nueva Zelanda y 10 kg/m² en Australia.
La Directiva de la UE -UE, 2007- regula otros detalles del manejo de los pollos, como la intensidad de la luz – 20 lux -, la duración de la oscuridad – 8 horas – y el nivel de amoníaco – 20 ppm -. Durante los últimos años, numerosos acuerdos de bienestar con estándares de bienestar más altos se han establecido entre las ONG orientadas al bienestar, los comerciantes minoristas y los criadores. En la mayoría de los casos se reduce la densidad de población y otros criterios, que no están regulados por las leyes, están incluidos. En Alemania los pollos criados baja la “Iniciativa Tierwohl “ deben disponer de materiales de enriquecimiento, tales como bloques para picar o cestas de heno. Según algunos esquemas el ritmo de crecimiento máximo en la producción de pollos ecológicos está limitado y debe disponerse de aseladeros.
Para la producción de pavos no existe ninguna regulación de la UE. El único lugar donde la producción de pavos está legalmente regulada desde el año 2006 es en los Países Bajos. Las recomendaciones para la producción de pavos se contemplan en el Convenio para la Protección de los Animales de Granja – UE, 2001 -, que contiene una lista completa de criterios de bienestar, incluyendo el comportamiento, el rendimiento, la salud y la mortalidad. Otras recomendaciones son proporcionadas por el “Farm Animal Welfare Council” en el Reino Unido – FACW, 1995 -, por el “Welfare Quality Consortium” – UE, 2012 – y por algunas otras ONG. La producción de pavos en Alemania se regula a través de un “Acuerdo Voluntario”, en el que las asociaciones de productores, las ONG y los funcionarios del Ministerio afectado se pusieron de acuerdo sobre la densidad máxima de población y otros detalles del manejo y cuidado de los animales.
Los minoristas son las fuerzas motoras más importantes en muchas regulaciones no gubernamentales de bienestar
Normas para ponedoras
En Suiza y la UE hay abundancia de normas de bienestar para gallinas ponedoras, con las leyes y reglamentos detallados en los que la densidad de población desempeña un papel central, siendo la mínima permitida en las jaulas enriquecidas de 750 cm²/ave – 1999 -. Sin embargo, existen países con regulaciones más estrictas. En Alemania, la densidad mínima es de 890 cm²/ave y hay una fuerte resistencia de las organizaciones de bienestar animal a las jaulas, mientras que los minoristas han decidido no vender huevos de ningún tipo de jaulas. Por lo tanto, la mayoría de los productores de huevos han sustituido las jaulas por instalaciones sobre yacija, aviarios o al aire libre.
Tras la prohibición de las jaulas convencionales en la UE, en Estados Unidos, donde la mayoría de las instalaciones son de este tipo, se inició el debate. La “United Egg Producers” – UEP – recomiendan un espacio de 430 cm²/ave, pero en la mayor parte de casos las densidades más utilizadas son de 350 a 400 cm2/ave. En California las jaulas convencionales han sido prohibidas en 2015 e importantes cadenas de comida rápida y minoristas recientemente anunciaron que dejarían de vender huevos en jaulas. Estados Unidos sigue obviamente la tendencia de los países europeos a proporcionar a las gallinas ponedoras más libertad de movimiento.
El corte de picos, la muda forzada y el sacrificio de los machitos recién nacidos de las líneas para puesta son temas de enconados debates. El corte de picos como medio para reducir el daño debido al picaje de las plumas y el canibalismo es permitido por la UE hasta los 10 días de edad, pero en Suiza, Suecia, Noruega y Finlandia está prohibido. En el Reino Unido, el corte del pico sólo se permite con tratamiento por infrarrojos. Pero recientemente varios países han anunciado una próxima prohibición del corte de picos, mientras que en Alemania, al esperarse una renuncia voluntaria a partir de 2017, se han puesto en marcha varias investigaciones y proyectos para ayudar a los productores de huevos al manejo de las aves el pico intacto.
El problema de la muda inducida está siendo discutido como cuestión de bienestar, principalmente en Estados Unidos. Aunque allí no está prohibida, una cadena de comida rápida ha dejado de usar huevos de manadas mudadas.
El sacrificio de los machitos recién nacidos de las líneas de puesta se ha convertido en una cuestión importante de bienestar en Alemania. Hasta ahora este procedimiento no se ha prohibido siempre que se lleve a cabo utilizando métodos adecuados para que los pollitos no sufran. Sin embargo en las leyes alemanas hay un párrafo de protección animal que indica que ningún animal debe ser sacrificado sin razones “sólidas”. El hecho de que los machitos de las líneas para puesta no pueden ser criados por razones económicas para la producción de carne no se acepta generalmente como “razón sólida” y se está intentando formular una legislación para prohibir esta práctica en general.
Aspectos económicos del bienestar
La mejorar del bienestar de las ponedoras y los broilers se relaciona con un mayor espacio, la provisión de recursos de enriquecimiento y una intensificación del control. La transición de las jaulas a los aviarios y sistemas en el suelo aumenta los riesgos de picaje y canibalismo – Sherwin y col., 2010 -, un efecto más pronunciado cuando las aves no tienen el pico cortado – Hartcher y col., 2015 -.
Un aumento de la producción al aire libre requiere energía para el ejercicio y compensación por las bajas temperatura ambiente bajo condiciones climáticas moderadas y frías. En los pollos de engorde hay un aumento lineal del coste de producción con menores densidades de población – Shanawany, 1988 – y el beneficio por unidad de superficie disminuye proporcionalmente. El efecto principal de la densidad de población sobre el resultado económico se basa en la disminución del costo de alojamiento, calefacción y mano de obra. Los costes aumentan aún más cuando se proporciona material de enriquecimiento. Según nuestros cálculos, los costes aumentan en 0,03 €/kg de peso cuando la densidad de población se reduce de 39 a 35 kg/m² en los pollos y la instalación de bloques para picar produce un nuevo aumento de 0,003 €/kg de peso.
En las ponedoras en jaulas con densidad, el pasar de 350 a 400 cm2/ave ha demostrado producir óptimos resultados económicos – Bell, 2000 -. Hay un aumento lineal en el coste de producción cuando aumenta el espacio por ave en jaulas convencionales o enriquecidas bajo el stándard de la UE o bien a sistemas sobre yacija, con 1.111 cm²/ave – Van Horne y Achterbosch, 2008 -. Según Matthews y Sumner – 2015 – el coste por huevo aumenta en un 13% en las jaulas enriquecidas y en un 36% en los aviarios en comparación con las jaulas convencionales.
El tener a las gallinas con el pico intacto en comparación con el pico cortado cuesta de 0,22 a 0,49 € por gallina y año – Damme y col., 2013 -. El escenario de una prohibición del sacrificio de los machitos recién nacidos pollitos y el empleo de razas de doble utilidad en lugar de las estirpes convencionales de puesta y las líneas de pollos de engorde ha sido estudiado por Damme y col. – 2015 -, indicando que ello originaría un sobrecoste adicional de 0,026 a 0,039 €/huevo.
El aumento relativo de los costes de producción parece ser pequeño y se supone que los consumidores en Europa están dispuestos a pagar por unos mayores standards de bienestar. Sin embargo, los minoristas responden a diferencias de precios extremadamente bajas y los costes adicionales para el bienestar no son aceptados si no hay una etiqueta especial que asegure un mayor precio para el consumidor. Como en la UE se imprime el sistema de alojamiento en forma de código numérico sobre el huevo, los consumidores generalmente ya están informados sobre ello y pagan un precio más alto para los procedentes de gallinas al aire libre y los ecológicos. Unas medidas adicionales de bienestar, como la colocación de materiales de enriquecimiento y la renuncia al corte de picos, a la muda forzada y al sacrificio de los machitos recién nacidos necesitarían ser comunicadas a los consumidores.
Factores que impulsan el desarrollo del bienestar animal
Las solicitudes de mejora de las normas de bienestar se señalan tradicionalmente a la atención de las autoridades para ser incorporadas a la legislación. Dado que esta suele ser un compromiso entre las organizaciones de bienestar, los productores, los minoristas y los consumidores, los actos jurídicos resultantes en la mayoría de casos no satisfacen plenamente los intereses particulares de todas las partes implicadas. En consecuencia, diferentes coaliciones de interesados han desarrollado sus propios standards de bienestar. En Alemania existían unos “Acuerdos Voluntarios “entre las organizaciones de productores avícolas, las de bienestar y las autoridades gubernamentales que regulan los requisitos mínimos en la producción de pavos y pollos a nivel nacional. El Acuerdo Voluntario para los pollos de engorde ha sido sustituido por un reglamento legal, aunque para pavos todavía se utiliza una versión actualizada del 2013.
Los minoristas son las fuerzas motoras más importantes en muchas regulaciones no gubernamentales de bienestar y las organizaciones de este tipo están involucradas en el desarrollo de las normas. Esto protege a los minoristas de las campañas adversas de los defensores del bienestar en los medios de comunicación y en los mercados. Los agricultores, sin embargo, que no estuvieron involucrados en la discusión, tuvieron que soportar los mayores costos de las producción “amistosas con el bienestar”.
Recientemente, las organizaciones de productores avícolas de Alemania decidieron iniciar unas sus propias etiquetas de bienestar en cooperación directa con cadenas minoristas
– www Initiative Tierwohl.de -. Los minoristas pagan 0,0004 € por kilogramo de carne de ave en un fondo central de bienestar. Las granjas certificadas participantes reciben una gratificación por sus mayores costos de producción. Asumir un papel de liderazgo en el establecimiento de normas de bienestar no sólo garantiza que los reglamentos sean científicamente racionales y económicamente viables, sino mejora la imagen de los avicultores en el público. Además, genera conciencia entre los minoristas consumidores sobre los costes del bienestar.
Conclusiones
La percepción del bienestar difiere en gran medida entre países y continentes. Las definiciones sobre el bienestar no sólo dependen de los antecedentes culturales, sino también del nivel de vida de la población humana. Esto se refleja en diferentes niveles de legislación sobre el bienestar y las normas de bienestar entre los países.
El principal bienestar los problemas en la producción de huevos son la explotación en baterías, la densidad de población, el corte del pico, la muda forzada y el sacrificio de los machitos recién nacidos de las líneas de puesta. En la cría de pollos, las densidades de población, los programas de luz, el estado de la cama y los problemas de patas son los principales puntos de preocupación en relación con el bienestar.
Los niveles más elevados de bienestar conducen a un aumento considerable de los costes de producción. Bajo condiciones competitivas del mercado internacional las diferentes normas legales de bienestar conducirán a un desplazamiento de la producción hacia países con niveles más bajos de bienestar. Actualmente ya hay minoristas de productos avícolas cooperando con unas ONG orientadas al bienestar y/o con organizaciones de productores avícolas en establecer normas especiales de bienestar que sean independientes de la situación jurídica del país de producción. Estas normas no sólo atenuarán las diferencias en los costes de producción entre los productos elaborados según unas normas de bienestar sino que también conducirán a una armonización de las mismas entre países.