La producción de huevos camperos (*) es una parte importante y pujante del sector avícola del Reino Unido. El objetivo de este artículo es describir cómo se estructura y opera, así como para proporcionar un resumen de los resultados que se obtienen y los aspectos económicos actuales.

La explotación de gallinas camperas es la que tiene más éxito de los tres principales sistemas de producción de huevos no de baterías en cuanto a su cuota de mercado, en comparación con las otras dos, sobre yacija y ecológica. En términos generales, el sector de la producción de huevos camperos ha ido aumentando su cuota de mercado. De acuerdo con el Departamento de Medio Ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales –DEFRA–, de un total de 27 millones de cajas de huevos producidos en el Reino Unido en 2014, la producción de los camperos representó el 43%. En comparación, la producción de huevos en baterías fue del 52 %, la de huevos sobre yacija del 2,7 % y la de ecológicos el 2,3 %.

En el Reino Unido los huevos camperos se producen principalmente en granjas privadas, proporcionando a muchos una muy valiosa ayuda adicional en sus explotaciones ganaderas y agrícolas. Los huevos se comercializan generalmente mediante contratos con empresas mayoristas de huevos especializadas, las cuales también suelen tener granjas propias de aves camperas. Los precios de los huevos pagados a los productores pueden establecerse sobre una base contractual o bien de acuerdo a las condiciones del mercado. En algunos casos, el precio del huevo está relacionado con el coste de la alimentación, lo que reduce los efectos de las grandes fluctuaciones en el precio del pienso. Por lo general, los huevos son vendidos por los envasadores a las principales cadenas de supermercados, algunos de los cuales ahora sólo adquieren huevos de sistemas libres de jaulas.

El Código de León, el RSPCA Asegurado(**) y la Asociación del Reino Unido de Productores de Huevos Camperos

La gran mayoría de los huevos camperos se producen de acuerdo con el Código del León y las normas de garantía de RSPCA.

El Código del León es un sistema de acreditación que abarca todos los sistemas de producción de huevos. Algunas de las normas incorporadas en el mismo son superiores a las indicadas en la legislación de la UE. Bajo este esquema, las granjas son auditadas regularmente, se utiliza un sistema de pasaporte único para garantizar la trazabilidad y todas las gallinas son vacunados contra Salmonellas.

El RSPCA Asegurado es también un sistema de acreditación aunque sólo cubre el sector del huevo no de batería del Reino Unido. Las normas del mismo también pueden exceder a las de la legislación de la UE. El RSPCA Asegurado recientemente se recalificó como “Freedom Food” (***) con el fin de crear un vínculo más reconocibles de la RSPCA, que es la organización benéfica que lleva el bienestar animal en el Reino Unido. El esquema se enorgullece de haber creado una etiqueta que permite a los consumidores reconocer los productos animales que han tenido una vida mejor.

La Asociación Británica de Productores de Huevos Camperos –BFREPA- se estableció en 1993 y representa los intereses de los mismos. Ahora cuenta con más de 500 miembros que disponen desde pequeñas granjas de 500 gallinas hasta otras de gran capacidad, sumando entre todos ellos alrededor de diez millones de gallinas. La BFREPA produce una revista técnica mensual dirigida a productores, proveedores y otras partes interesadas en el sector y mantiene un sitio web informativo en www.theranger.co.uk. Cada año en otoño, BFREPA organiza una conferencia de productores que suele atraer a más de 300 asistentes.

Sistemas de producción, tamaños de los gallineros y manadas

Para la mayoría de los productores, el número máximo de gallinas en una nave es establecido por los límites del Código del León y RSPCA que lo limitan a un máximo de 16.000 aves, separadas en grupos de 4.000 dentro en aquellas que pasan de 6.000 cabezas. Esto significa que cada grupo de 4.000 gallinas tiene que mantenerse separado dentro del gallinero mediante una partición que impida la mezcla entre ellos.

La mayoría de gallineros utilizados producción de huevos camperos son naves de ventilación natural y un solo nivel pero cada vez se montan más aviarios (****) ya que suelen tener unos costos operativos más bajos. Las naves transportables también se utilizan a veces aunque son más comunes en el sector ecológico, donde las manadas son mucho más pequeñas. En los alojamientos de un solo nivel la densidad máxima de población es de 9 gallinas/m2 de superficie útil, que comprende una zona de yacija y otra de slats. El área de la cama se encuentra generalmente en los dos lados del foso o, dependiendo del diseño de la nave, a veces en un solo lado, debiendo cubrir, al menos, una tercera parte de la superficie del local. En la zona de slats, por lo general elevada en torno a un metro para permitir recoger la gallinaza debajo, están dispuestos los comederos, los bebederos y los nidales, estos últimos, por lo general, en el eje central de la nave.

En los aviarios, o sistemas de varios niveles, la densidad de población se puede aumentar hasta un máximo de 15 gallinas/m2 de zona utilizable cuando se calcula a nivel del suelo, según normas de la RSPCA. En estos sistemas, los comederos, los bebederos y los nidales están situados en una serie de diferentes niveles -máximo cuatro-, que se apilan uno encima del otro con al menos 45 cm de espacio entre ellos. Las deyecciones se recogen en cintas de plástico que discurren a todo lo largo de local y la totalidad del piso está cubierta de yacija.

El costo promedio de inversión para un nuevo gallinero es de alrededor de 33 € por ave (*****), habiendo muy poca diferencia entre los de un solo nivel y los aviarios. La solicitud de permiso de obras para montar un nuevo gallinero puede ser un proceso muy arduo, que a menudo es caro y lleva mucho tiempo, sin haber ninguna garantía para su aprobación. Los sistemas de alojamiento a veces se pueden convertir de un solo nivel a aviarios, lo que permite aumentar el número de gallinas sin necesidad de obtener una aprobación para la planificación de nuevos edificios (******).

Independientemente de si se trata de un solo nivel o varios, se debe proporcionar 1 m2 de espacio de ponedero por 120 gallinas, 15 cm de aseladero por gallina, una cama adecuada – viruta de madera – para permitir escarbar a las aves para sus baños de polvo y otras conductas naturales y trampillas de salida al parque de, al menos, 2 m de ancho y 45 cm de altura –esquemas del Código del León y RSPCA Asegurado-. Con la tendencia a naves más grandes, la recogida mecánica de huevos y el envasado a máquina son lo habitual. Dado el clima húmedo del Reino Unido, el mantenimiento de la cama seca a menudo es difícil, por lo que en lugar de utilizar la ventilación natural se está yendo a los sistemas de ventilación forzada.

Los parques

Según la legislación de la UE, la densidad máxima de población en el parque debe ser de 2.500 gallinas por hectárea. Sin embargo, el Código del León y el RSPCA sólo permiten una densidad máxima de población de 2.000 gallinas/Ha. Es importante que se anime a las gallinas a salir al parque y una gran cantidad de trabajos de investigación se han centrado en el comportamiento de las mismas a este respecto. Las estrategias para fomentar el uso del parque incluyen la incorporación de abundantes refugios naturales, como árboles, setos y otros cultivos, así como refugios artificiales. Otras estrategias incluyen el acompañamiento de otros animales como ovejas y llamas o alpacas, así como asegurarse de la ausencia de depredadores. Los zorros son un gran peligro para las gallinas al aire libre en el Reino Unido y normalmente se requiere disponer de cercas eléctricas a prueba de ellos.

Las gallinas deben tener acceso continuo al parque durante el día y este debe gestionarse bien para asegurar una buena salud y bienestar de las gallinas. La tendencia hacia el aumento de tamaño de los gallineros, lo que aumenta la eficiencia económica, a veces puede tener un efecto negativo en el comportamiento de las gallinas en el parque, por lo que deben adoptarse las estrategias necesarias para fomentar su salida al mismo.

Tipos de aves y rendimientos

En el Reino Unido los consumidores están acostumbrados a huevos de color marrón, utilizando principalmente para ello las estirpes Lohmann, Hyline, Bovans e ISA Warren. Las aves suelen ser criadas en una granja diferente hasta que a las 16 semanas de edad se transfieren a la granja de la puesta. El traslado del criadero a las naves de puesta representa frecuentemente un largo viaje y como ello puede ser estresante para las aves se aconseja que las condiciones al final de la recría coincidan lo más posible con las del período de introducción a la nave definitiva. Por ejemplo, haciendo coincidir los horarios de iluminación, los tipos de bebederos y de comederos y los sistemas de producción, sobre yacija o en aviario, para facilitar la transición entre la crianza y la puesta. En cuanto al sistema de producción en la recría, en la actualidad la mayoría de las granjas aun lo hacen sobre yacija aunque algunos criadores ya están yendo hacia los aviarios.

La duración del período de puesta ha tendido a aumentar en el último par de años, siendo actualmente, de promedio, de unas 58 semanas, lo que representa una edad de sacrificio de 76 semanas. Con los avances en la genética, es probable que las aves se mantengan en puesta aún más en el futuro debido a los altos rendimientos que se pueden lograr, habiendo ya algunos productores que las tienen hasta las 80 semanas (*******).

De promedio, las gallinas camperas producen alrededor de 300 huevos por ave hasta 72 semanas de edad. El consumo medio diario de pienso es de unos 130 g/ave/día en los sistemas sobre yacija y por lo general algo menos en aviarios, mientras que la mortalidad media es alrededor de un 7 %. Sin embargo, cabe señalar que en las granjas de gallinas camperas existe una gran variabilidad en el rendimiento de las manadas y algunas podrían tener una mortalidad mucho más alta o una producción de huevos mucho más baja que otras.

Economía de la producción (********)

Los costes medios de producción del huevo campero en el Reino Unido son analizados cada mes por el ADAS, siendo generalmente más elevados que los de los huevos procedentes de jaulas. Esto se debe en parte a los mayores costes de los elementos comparables, como la alimentación y la mano de obra, y también a otros costes añadidos, como el manejo de la yacija y el pasto. Los dos principales variables que afectan la rentabilidad de los productores son los precios de los piensos y del huevo.

El coste promedio de producción del huevo campero en la actualidad es de aproximadamente 1,27€ por docena, pero esto puede variar de 1,05 € en el 25 % de las granjas más eficientes a 1,40 € en el 25% de las que son menos. Estas cifras incluyen todos los gastos en que incurren los productores, como los mencionados anteriormente, además de elementos tales los de las reparaciones y mantenimiento, arrendamiento de la tierra, el agua, la eliminación de las aves muertas, los seguros, el control de plagas y los desinfectantes y los consumibles para la impresión de los huevos de la granja.

Los precios del pienso han disminuido considerablemente en el transcurso de 2015 y ahora están, de promedio, a unos 282 €/tonelada. Los precios fluctúan en especial en respuesta a los cambios en el precio del trigo y la soja. Los precios de los huevos de corral se han mantenido estables en el conjunto del 2015, a un promedio de 1,27 € por docena. Debido a una alta demanda de huevos y a unos menores costos de producción, los rendimientos de muchos productores han mejorado recientemente. El pienso representa de lejos la partida más elevada de los costes, unos 0,55 € por docena de huevos, siguiéndole la de la amortización de las pollitas, de alrededor de 5 €. Los coste promedio de la mano de obra representan unos 0,15 € por docena de huevos.

El valor actual de las gallinas de desvieje en el Reino Unido también merece una mención. Dados los recientes brotes de gripe aviar, muchas oportunidades de exportación para las canales de gallinas ponedoras se han perdido y su valor ha experimentado grandes cambios en los últimos meses. Actualmente no tienen ningún valor económico y los costes de su retirada sólo son cubiertos por algunos mataderos, una situación en marcado contraste con los 0,53 € por gallina que los productores recibían hace un año, lo que ha tenido un impacto notable en sus ingresos. En la actualidad se presta especial atención a disponer de una buena bioseguridad en las granjas de gallinas camperas debido a la amenaza que plantea la gripe aviar para los manadas al aire libre.

Para concluir, el sector del huevo campero en el Reino Unido es floreciente. Las tendencias estadísticas sugieren que superará a la producción de huevos en batería en un futuro previsible, convirtiéndolo en el más prolífico de los sistemas en el Reino Unido. •