La necesidad más vital de los seres vivos es el aporte de oxígeno. Por tanto, la ventilación por la cual aporta- mos este elemento a los pollos durante su crianza es necesaria en mayor o menor cantidad desde antes de su nacimiento pues los huevos embrionados colocados en la incubadora necesitan su aporte desde el inicio de su desarrollo.

Una correcta ventilación nos permite mantener:

1.Un aire de calidad que aporta el oxígeno necesario -más del 20 %- para una correcta respiración.

2.La eliminación de gases tóxicos tales como el dióxido de carbono y el amoníaco, cuyos niveles deben estar por debajo de 3.000 ppm y 20 ppm, respectivamente (RD 692/2010, del 20-5-2010).

3.Una temperatura óptima para el máximo aprovecha- miento del pienso, definida como la “temperatura de confort”.

4.Una humedad relativa -HR- del 50-70%.

5.Una distribución homogénea por toda la nave de las condiciones ambientales deseadas, sin corrientes de aire, diferencias térmicas, etc.

Estos cinco factores están relacionados entre sí, de tal manera que la modificación de alguno de ellos afecta a alguno de los otros.

En cualquier caso, si se establece una ventilación adecuada para controlar la temperatura y la HR en sus parámetros correctos, se obtiene el aporte necesario de oxígeno y la eliminación de gases tóxicos excesivos.

En la tabla 1 se muestran las condiciones óptimas de temperatura y humedad relativa para un máximo rendi- miento de los pollos.

Estas condiciones son orientativas, de tal manera que es básico y fundamental la cuidada observación de los pollos para ajustar las mismas dependiendo de la granja, la climatología, etc.

Factores climáticos

Las condiciones climáticas de las diferentes zonas determinan el diseño y equipamiento de las granjas. En

nuestra zona de influencia (1), donde el clima es extre- mo, deben disponer de unos sistemas de calefacción y ventilación eficaces ya que los resultados productivos a lo largo del año vienen determinados por las condiciones climáticas que se manifiestan en el momento.

Las explotaciones deben disponer de sistemas que mediante una gestión adecuada compensen las condi- ciones desfavorables para el confort de los pollos. Esto se consigue con unos sistemas de calefacción y venti- lación suficientes y controlables. En cuanto a la venti- lación, ésta debe permitir establecer el control de:

–El caudal de aire entrante y saliente.

–La velocidad del aire a nivel de los pollos.

–El circuito del flujo de aire.

–La presión estática.

Factores fisiológicos

Los pollitos nacen siendo “poiquilotermos”, no te- niendo capacidad para regular su temperatura interna hasta unas dos semanas de vida, cuando adquieren su condición de “homeotermos”. Esto implica que nuestra

(1) El autor de este trabajo pertenece a una integración que opera principalmente en la provincia de Lleida.

APLICACIÓN DE LOS CONCEPTOS DE VENTILACIÓN

mayor preocupación tiene que ser asegurarnos de que tengan la temperatura necesaria de una manera cons- tante, sin oscilaciones.

Los pollos transforman el pienso y agua que ingieren en energía para su mantenimiento y desarrollo, ganando peso de carne. Este proceso genera un calor y una humedad que expulsan al ambiente de la granja.

Para demostrar lo que se puede conseguir mediante un buen control ambiental, exponemos en la figura 1 unos datos sobre los índices productivos de los años 2000 y 2010 de los pollos terminando su crianza en cada uno de los meses indicados.

En primer lugar, como suele suceder cada año, se confirman los mejores resultados con los pollos sacrifi- cados el último trimestre. Esto es debido, a que durante este periodo, en el arranque podemos caldear fácilmente y durante el resto de la crianza mantener la temperatura sin dificultad mediante una adecuada ventilación.

Pero como la ventilación es la herramienta más eficaz para aportar a los pollos las adecuadas condiciones de confort y obtener un máximo rendimiento, a la vista de los resultados del año 2000 establecimos una estra- tegia para optimizar la misma en las granjas colaborado- ras mediante la implantación gradual del correspondien- te control ambiental, de acuerdo a las condiciones de cada una de ellas.

El resultado, después de 10 años de actuaciones, queda reflejado también en la figura mediante la com- paración de los índices productivos de los años referidos.

Fig. 1. Índices productivos de los broilers de los años 2000 y 2010 (Datos propios).

Desde ya hace muchos años la época más crítica para una crianza óptima de los pollos es la cálida del más largo verano. Por esta razón, nos centramos en la instalación de sistemas de ventilación tipo túnel.

La experiencia del cambio fue positiva desde el inicio de su lenta implantación. De tal manera, que

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La época más crítica para una crianza óptima de los pollos es la cálida del más largo verano

prolongamos su funcionamiento pasado el verano in- cluso durante los meses de invierno, aunque este nuevo planteamiento nos exigió limitar los caudales de extracción y adecuar las entradas de aire.

Como consecuencia de esta adecuación, la ventila- ción durante épocas templadas y frías mejoró sensible- mente al mejorar su gestión.

En la actualidad nuestra propuesta es ventilación controlada con extractores de caudal medio – 12.000- 18.000 m3/h – para una ventilación mínima y transición, y extractores de gran caudal -36.000 m3/h- para la ventilación túnel.

Todos los extractores se instalan en un extremo de las naves.

Es muy importante que las entradas de aire sean las adecuadas al caudal extraído en cada momento. Para ello es imprescindible que el caudal de aire a extraer pueda funcionar de un modo progresivo para adecuarlo a las necesidades de los pollos de una manera continuada.

Con esta idea intentaremos aclarar los conceptos clásicos de ventilación, bien la mínima, la de transición y la del sistema túnel

Ventilación mínima

Su objetivo es mantener la calidad del aire, aportando oxígeno sin necesidad de extraer calor de la nave, con- trolando la humedad relativa y eliminando gases nocivos -dióxido carbono, amoníaco, etc.-. Para alcanzar este objetivo hay que considerar:

1.El aire entrante NO debe incidir sobre los pollitos. Debe entrar de tal manera que se mezcle, de una manera homogénea, con el caliente de la nave situado en la cumbrera de la misma, antes de llegar a los pollitos. Esto permitirá un ahorro del 20-25% de la calefacción por su máximo aprovechamiento.

El depresiómetro es fundamental para controlar el flujo del aire entrante, adecuando la entrada del mismo con el caudal extraído.

2.Una ventilación mínima es imprescindible para controlar la humedad relativa y el buen estado de la yacija, lo cual es necesario para minimizar la producción de amoníaco. Para este último fin nos

podemos ayudar de una máquina escari- ficadora que remue- va la yacija y mejore su condición.

Conviene recordar que las lesiones iniciales de pododermatitis se inician a una edad tem- prana de los pollos. Como creo que en breve se va- lorará a cada explotación por el nivel de este tipo de lesiones presentes en el matadero, es necesario una adecuada preven- ción de dicho proceso.

3.Es imprescindible precalentar la yacija antes de ubicar los pollitos, alcanzando una temperatura de, al menos, 28ºC. En tiempo frío, esto sólo se alcanza si el siste- ma de calefacción

funciona desde 24 horas antes de la llegada de los pollitos.

Cada 10-11ºC de incremento de la temperatura del aire se duplica su capacidad de retención de agua y en consecuencia la HR disminuye a la mitad

Esto supone un gasto de oxígeno que conviene considerar y añadir a las necesidades mínimas de los pollitos. Por tanto, es conveniente preventilar la granja, haciendo una renovación del aire de la misma antes de la descarga de los pollitos.

4.Se necesita una ventilación mínima, indepen- diente de la temperatura y humedad relativa exteriores. El aire frío contiene poco cantidad de vapor de agua, aunque su HR sea tan alta como el 100%. Si este aire se calienta al mezclarse con el aire interior, reduce su humedad relativa, quedando en

condiciones de absorber vapor de agua durante su recorrido por la nave y sacarlo de la misma. Basados en la carta psicométrica o diagrama de

Mollier -figura 2-, vemos que si 1 kg de aire exterior está a 0ºC y tiene una HR del 100% contiene 3,8 g de vapor de agua. Si lo introducimos en la nave, pasando a las condiciones ambientales de 28ºC y 65% de HR, podrá contener 15,5 g de vapor de agua, por lo que al evacuarlo se llevará 15,5 – 3,8 = 11,7 g de vapor agua de la nave.

Basados en estos cálculos, vemos que cada 10-11ºC de incremento de la temperatura del aire se duplica su capacidad de retención de agua y en consecuencia la HR disminuye a la mitad.

La pérdida de calor por esta práctica es insignificante comparada con el beneficio a lo largo de la crianza, manteniendo buena sanidad y buen rendimiento.

5.La estanqueidad de la granja es determinante. En una nave que necesite mejorar el sistema de venti- lación, la manera más rápida, sencilla y barata de conseguirlo es mejorando su estanqueidad, elimi- nando todas las fugas parásitas de aire. Una correcta estanqueidad reduce el gasto de calefacción, evita humedad en la yacija y por tanto, mejora el confort de los pollos.

Las entradas parásitas más perjudiciales se pueden localizar en la parte más alta de las naves así como a nivel del suelo -en las puertas- y en extractores y ventanas desajustadas. Una nave se considera “estanca” si ce-

APLICACIÓN DE LOS CONCEPTOS DE VENTILACIÓN

rrando todas las entradas de aire y funcionado con un extractor de 36.000 m3hora se consigue una depresión de 30-37 Pascal. En una instalación moderna y bien diseñada deben poder medirse más de 80 Pascal.

6.La ventilación mínima se controla por tiempo. Las necesidades de ventilación mínima, dependientes del peso-edad de los pollitos, se encuentra en los manuales de manejo de las estirpes de pollos. A continuación se exponen dos ejemplos de éstas.

Tabla 2. Baremo de ventilación mínima para una nave con 20.000 pollos, según edad (*)

Tabla 3. Baremo de ventilación mínima, según peso de los pollos (*)

(*) Manual de manejo Ross

Cálculo del tiempo de extracción

Supongamos una granja de 30.000 pollos de 500 g de peso. Aplicando el baremo de la tabla 3, la necesidad de ventilación mínima es de 0,417 m3/hora por pollo, por lo que

0,417 m3/hora x 30.000 pollos =12.510 m3/hora Si se dispone de 3 extractores de 18.000 m3/hora,

tendríamos

18.000 m3/hora m3/h x 3 = 54.000 m3/hora Con lo que tendrían que funcionar

12.510 / 54.000 = 23% del ciclo

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El objetivo de la ventilación de transición es mantener la temperatura en la zona de confort, extrayendo el calor sobrante y evitando que el aire del exterior incida directamente en los pollos

Ventilación de transición

El objetivo de la ventilación de transición es mante- ner la temperatura en la zona de confort, extrayendo el calor sobrante y evitando que el aire del exterior incida directamente en los pollos. Para alcanzar el objetivo hay que considerar:

1.La necesidad del control de la presión estática.

Las trampillas de entrada del aire estarán colocadas en las paredes laterales de la nave. Para su apertura adecuada, según el caudal extraído, es imprescindi- ble un controlador de la depresión, ya que este caudal puede variar a lo largo del día.

2.Mantener la ventilación de transición el máximo tiempo posible. Conviene trabajar siempre que sea posible en transición, evitando el paso a la ventila- ción túnel. A medida que pasan los días, los pollos pesan más y desprenden más calor. Sin embargo, si la nave está bien diseñada es posible mantener en su interior la temperatura de confort, aunque la del exterior sea 5-6ºC superior o inferior a la deseada.

Pero en cualquier caso no hay inconveniente en pasar a la ventilación túnel si lo requiere el confort de los pollos.

3.Si es conveniente, se puede cambiar el modelo de ventilación. Si la temperatura exterior varía durante el día se puede pasar al modelo de túnel. Un lote puede necesitar ventilación de transición durante la noche y las primeras horas del día pero ventilación túnel durante las horas calurosas del día. Lo impor- tante es adecuar la ventilación al confort de los pollos.

4.Conviene considerar la temperatura efectiva. Es importante recordar la capacidad de enfriamiento que tiene la ventilación túnel por convección de tal manera que la temperatura efectiva o sensación térmica sea inferior a la del termómetro. Como siem- pre, hay que valorar el comportamiento de los pollos que nos manifiesta su grado de confort.

Tabla 4. Sensación térmica.

(*) Manual manejo Cobb

Entradas laterales de aire

Tanto en la ventilación mínima como en la de tran- sición es imprescindible que el aire entrante fluya en la dirección y velocidad adecuada. Esto depende del diseño, colocación y abertura de las entradas laterales de aire.

Con una temperatura exterior baja, un manejo ade- cuado de las entradas permite mezclar el aire frío entran- te con el caliente del interior, lo que aporta varias ventajas pues se evita la estratificación del air

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