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SUSCRIBIRSEEste artículo es parte de la edición de junio, 2018
ESTRATEGIA DE LA INTERPROFESIONAL FRANCESA CNPO PARA EL SECTOR DE PUESTA
La mitad de las gallinas estarán en sistemas alternativos en 2022
La organización CNPO, la interprofesional francesa del sector de la avicultura de puesta, presentó a finales de abril su estrategia para los próximos años. Han lanzado la marca de calidad “Huevos de Francia” con la que esperan proteger su mercado interior de las importaciones de otros países de la UE, de la misma forma que han hecho los productores británicos con su logo “Lion Egg”.
Es una forma de promover que los operadores de la distribución y la industria alimentaria franceses muestren abiertamente su compromiso con los huevos de proximidad, producidos en Francia, comprando los que llevan el logo, que se relaciona con la máxima calidad y frescura. Esta será sin duda una nueva barrera al mercado único, que en el caso del huevo fresco está cada vez más fragmentado en mercados nacionales. Y podrá afectar a las exportaciones de huevo en cáscara de España, que tiene en Francia su principal cliente exterior.
Por otro lado, los productores se han comprometido a alojar la mitad de las gallinas francesas en sistemas sin jaula en 2022 – ahora suponen la tercera parte del censo -. Este plan, que se ha iniciado en 2016, supone una transición de 5 años en los que se prevé invertir al menos 277 millones de euros para que la producción de 9 millones de gallinas en jaula pase a sistemas alternativos.
El objetivo es muy ambicioso y los ciudadanos franceses lo saben. Por ello la CNPO ha hecho un estudio de opinión entre los consumidores, de los que un 79 % opinan que los distribuidores deben tener en cuenta este plazo para adaptarse y que deberían apoyar financieramente en esta transición a los productores.
Este proceso de cambio estaba acordado con el Ministerio de Agricultura, aunque pareció alterarse ante las desafortunadas declaraciones del Ministro francés en las que anunciaba que la venta de huevos de gallinas en jaula en las tiendas francesas estaría prohibida en 2022, a lo que los productores respondieron rotundamente confirmando que era imposible pedirles ese esfuerzo. •