Este artículo es parte de la edición de noviembre, 2015

Las gallinas camperas de Los Arcos, Navarra

Aleix Giménez

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Los Arcos es una población navarra de unos 1.200 habitantes, situada en la Merindad de Estella, a una altura sobre el nivel del mar de unos 450 metros. En estas tierras la agricultura juega un papel muy importante y el 67 % de la superficie del municipio es terreno de labranza, ocupando las mayores extensiones agrícolas la cebada, el trigo y los espárragos. Pero también es tierra de viñas y, justamente en una zona donde éstas abundan, encontramos la Granja Valverde, llamada así por el nombre del lugar en el que se encuentra. Adrián Abaigar es el joven propietario de esta explotación de 8.000 gallinas camperas que tan solo lleva tres años y medio de recorrido.

La Granja Valverde está ligada al grupo EUSKABER, del cual ya hemos tratado en otras ocasiones, aunque en este caso con el fin de comercializar los huevos con la marca Larraz, indicativo de la cría de gallinas en libertad para la producción de huevos camperos y el sello de garantía y origen Reyno Gourmet.

Vale la pena añadir en este punto que en el montaje de la granja y en las lógicas dudas que puede tener todo quien se inicia en una aventura de este tipo Adrián ha contado en todo momento con la inestimable ayuda de su padre, Alberto Abaigar, veterinario del ITG Ganadero del Reino de Navarra.

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Adrián Abaigar, el joven propietario de la granja.

Instalaciones y equipo

La nave que visitamos tiene unas dimensiones de 81 x 13 metros -1.053 m2- y su correspondiente parque una superficie útil de 43.800 m2. La finca está vallada y hasta ahora no han tenido problemas con mamíferos depredadores, probablemente debido a que instalaron un cable pastor perimetralmente, aunque sí han sufrido numerosos ataques por aves rapaces.

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Panorámica del foso de la nave, con pollitas jóvenes, aun sin descender al suelo.

La nave es un tipo prefabricado de Big Dutchmann, con muros formados por paneles lacados y aislados con poliuretano –40 mm-, al igual que la cubierta, lo que permite asegurar a Adrián que en invierno se mantiene muy bien la temperatura.

La ventilación es mixta, por contar con trampillas en la parte superior de ambas fachadas principales y ocho chimeneas en el eje longitudinal de la cumbrera, en cinco de las cuales se cuenta con ventiladores para la extracción de aire. Tres de ellos son ventiladores de funcionamiento todo o nada, mientras que los otros dos se accionan gradualmente a fin de controlar la temperatura interior.

Las gallinas pueden desplazarse libremente por toda la parcela vallada

Para refrigeración se dispone de dos hileras de boquillas nebulizadoras Lubing, situadas a lo largo de los dos costados de la nave, operando a 70 bar de presión.

La disposición interior de la nave es la clásica, disponiendo de:

  • un foso de deyecciones central, con slats inclinados en sus costados, a fin de facilitar el acceso de las aves al mismo,
  • el ponedero comunal, de recogida mecanizada de huevos, situado en el eje central del edificio,
  • dos circuitos de comederos, ambos también sobre el foso, con uno de ellos más elevado por estar integrado con los aseladeros y de transporte de pienso por cadena,
  • dos filas de bebederos de tetina, también sobre los slats del foso, entre los comederos y el ponedero.

La granja es energéticamente autosuficiente, no teniendo conexión eléctrica a la red por utilizar energía solar –paneles fotovoltaicos– con este objetivo. Para ello dispone de:

  • 40 placas fotovoltaicas Jinko, de 240 Wp y 67 m2 de superficie, situadas en la cubierta de la nave,
  • 2 reguladores Schneider, que recogen la corriente continua de los paneles y se la pasan a las baterías,
  • 48 baterías de 1.250 Ah, para acumulación de electricidad en las horas nocturnas –o de poca insolación- en las que no se cargan las placas,
  • 3 inversores Xantrex, de 4,5 kw –que se encargan de transformar la corriente continua en corriente alterna-,
  • Un grupo electrógeno de 30 kw, de puesta en marcha automática

La empresa Ekain Taldea, S.L., de Errentería -Guipúzcoa-, fue la que se encargó de la instalación. Un detalle interesante que nos reveló Adrián es que el mayor consumo eléctrico se realiza durante las tareas de limpieza y desinfección de la nave, no durante el día a día habitual con las gallinas en ella.

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El amplio parque, con gallinas en plena libertad.

De todas formas, en caso de fallo en el suministro eléctrico se puede generar un sistema natural de ventilación por convección abriendo las trampillas de salida al exterior, así como las de la parte alta de ambas fachadas y las persianas de los ventiladores.

El parque

La nave dispone de 8 trampillas para salida de las aves al parque exterior, en cada una de sus fachadas principales. En el momento de nuestra visita, las gallinas estaban en el interior de la nave por tratarse de una manada entrada hacía poco que se encontraba a un 25 % de puesta y aun no se le permitía salir al parque hasta que esta no llegara a un 70 %.

Un detalle a este respecto es el riesgo de la puesta en suelo, que sería muy alto si se permitiera a las gallinas bajar a la zona de yacija o salir al exterior demasiado pronto, sin haber tenido tiempo de familiarizarse con la nave y especialmente con el ponedero. Por ello se tienen recluidas sobre el foso hasta las 20 semanas de edad y poco después se les abren las trampillas dejan de salida al exterior, con lo cual nos indicaron que se logra que la puesta en el suelo sea inferior al 0,3 %.

Nogales y almendros, dispuestos de forma ordenada en hileras, sombrean y dan cobijo en el extenso y cuidado parque que rodea la nave. Adrián, el granjero, reconoce que la agricultura le gusta igual que la avicultura. El terreno no se divide en parcelas sino que rodea unitariamente la granja, exceptuando un lateral donde se encuentra la entrada a ésta junto con los silos. Las gallinas pueden desplazarse libremente por toda la parcela vallada, independientemente de la trampilla por la que salgan.

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Una de las fachadas de la nave. Obsérvese las trampillas de salida de las aves, aún cerradas.

Las trampillas de salida al parque se abren automáticamente a media mañana para permitir el acceso a este cuando la mayor parte de las aves han puesto el huevo.

Con el fin de enriquecer la interacción de las gallinas con su entorno y aumentar las zonas de sombreo y su bienestar, se aprovechó la mitad sobrante de la estructura de varias chimeneas de ventilación, colocándolas en el suelo del parque para dar cobijo a los animales.

Manejo y comercialización

Las pollitas llegan a la granja a 17 semanas de edad, procedentes de la granja Pinseque de recría en la que se han criado en el suelo.

Obviamente, la granja funciona bajo la base del “todo dentro – todo fuera”, al formar parte del ya citado grupo Euskaber.

Hasta el momento han obtenido buenos resultados productivos, como se muestra en la gráfica adjunta, correspondiente a una de las manadas finalizadas, a 77 semanas de edad. El índice de conversión de su último lote ha sido de 1,60 kg/docena y el consumo de las gallinas fue de media 112 g diarios.

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Los reguladores y los inversores eléctricos montados por la empresa Ekain Tadea, S.L.

Se utilizan dos tipos de raciones –de piensos Artoa-, uno de prepuesta, durante tan solo 15 días -con un 16,5 % de proteína y un 3 % de calcio- y otro de puesta, con un 17,2 % y un 3,8 %, respectivamente. El maíz es el cereal base de los mismos, ocupando hasta un 50% de la ración y la harina de soja otro 25%.

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Fig. 1. Evolución de la producción y el peso del huevo de una manada anterior.

Según nos indica Adrián, al haber sido recriadas en suelo, las pollitas no están acostumbradas a comer desde la posición elevada que tiene el circuito integrado en los slats, lo que conlleva que se alimenten mayoritariamente del comedero central que se encuentra a su mismo nivel.

En verano se suministra un suplemento de vitaminas y aminoácidos para intentar estimular la ingesta de pienso. Durante el año también se ha hecho a veces pero en cantidades inferiores.

Un problema con el que se han enfrentado es el temido piojo rojo, contra el cual han luchado con éxito variable con el producto Elector, aparte de la limpieza escrupulosa de todo el equipo y una pulverización con gas-oil con la nave vacía entre manadas.

Un aspecto del manejo, que a veces hemos observado también en otras granjas es el que en el gallinero hay música permanentemente, con lo que se logra que las gallinas estén más calmadas, aparte de que ello también sirve para enmascarar los posibles ruidos exteriores.

Los huevos se recogen mecánicamente desde media mañana hasta el mediodía, lo que se repite durante menos tiempo por la tarde. Luego se envían sin clasificar dos veces por semana, con los de clases L y M juntos, al centro de Euskaber en donde son clasificados. Los XL se envían separados, mientras que los restantes –pequeños, fisurados, etc.– también siguen el mismo recorrido, pero para ir destinados a la industria.

En cuanto a los aspectos económicos, la adquisición del pienso y de las pollitas recriadas corre a cargo del granjero y Euskaber le compra los huevos a éste. El precio que percibe por ello es variable, dependiendo del precio del pienso, de cuya forma se consigue una cierta estabilidad en los rendimientos.•

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Etiqueta del producto de la granja: el huevo campero Larraz.

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