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Este artículo es parte de la edición de junio, 2013
Efecto de diferentes sistemas de corte de picos sobre el bienestar de las pollitas
R.L. Dennis y H.W. Cheng
Poultry Sci, 91: 1499-15056. 2012
Siendo el corte de picos una práctica habitual en la crianza de pollitas, desde hace tiempo está siendo cuestionada por parte de los defensores del bienestar animal, aduciendo el stress y el sufrimiento aplicado a los animales. Esto ha motivado que, en comparación con el clásico corte de picos realizado mediante cauterización por medio de una cuchilla caliente, se haya desarrollado un sistema basado en una tecnología por rayos infrarrojos –IR– que, aplicado en la sala de incubación, puede provocar un sufrimiento menor a las pollitas.
Dado que el sistema IR tiene la posibilidad de permitir el ajuste de la longitud de las placas y la intensidad del corte, decidimos llevar a cabo una experiencia con el fin de evaluar diferentes opciones, en comparación con un sistema de corte clásico con cuchilla caliente –CC-, por sus efectos a largo plazo sobre el bienestar y el comportamiento de las pollitas.
La experiencia la realizamos con una manada de 840 pollitas blancas W-36 recién nacidas, repartidas entre 7 tratamientos, un corte CC, realizado a 7 días de edad, en la granja, y 6 tipos de corte IR, realizados en la misma sala de incubación con una máquina Nova-Tech Eng. De estos últimos, tres de ellos se realizaron ajustando la placa para el corte a 25 mm y otros tres a 27 mm de longitud – lo que representa, respectivamente, un mayor o menor grado de severidad -, y en ambos casos con 23 mm de altura,-. En cada caso la lámpara de infrarrojos se ajustó a tres intensidades diferentes: 52 –alta-, 48 –moderada– y 44 –baja-.
Todas las pollitas se criaron en las mismas condiciones, en 10 baterías para 12 aves cada una por cada uno de los 7 tratamientos. A las 16 semanas de edad se trasladaron a una nave de puesta, provistas, al igual que durante la recría, de bebederos de tetina. Instaladas en jaulas para 5 aves, se eligieron al azar 20 pollitas de cada tratamiento, colocándoles una tilona en el ala para permitir hacer un seguimiento individual del estado de su plumaje.
Resultados
Se muestran resumidos en la tabla y figuras adjuntas.
Como puede verse en la tabla 1, a 30 semanas de edad las pollitas sometidas a un corte de picos IR con placa a 27 mm y una intensidad baja tenían ambos maxilares de una longitud significativamente superior que del grupo IR/25/52. A esta edad ya no se observó ninguna diferencia significativa en el peso vivo de las aves, aqnue a las 20 semanas sí las había, siendo las más pesadas las del grupo IR/27/48 y las que menos del IR/25/44.
Otros aspectos deducidos de la prueba y evidenciados en las figuras adjuntas fueron los siguientes:
- Un desperdicio de pienso significativamente superior con el CC que con los cortes IR/27/48, IR/25/48 e IR/25/52 – fig. 1-.
- Una superior proporción de aves bebiendo a 5 semanas de edad –fig. 2– con los 4 primeros tipos de corte IR en comparación con el CC, aunque ello se alterase 5 semanas más tarde –fig. 3-.
- Un picaje de plumas con una puntuación superior con los 2 primeros tipos de corte IR que con el corte clásico -fig. 4-.
- Un estado de las plumas significativamente mejor con dos de los cortes IR que con el corte clásico – fig. 5-.
En conjunto, estos resultados demuestran la conveniencia de un corte de picos por infrarrojos, aunque vigilando el ajuste de la máquina con el fin de adaptarse a la longitud del pico de las pollitas y teniendo en cuenta la estirpe y el tipo de aves de que se trate.
Tabla 1. Efecto de diferentes sistemas de corte de picos sobre la longitud del pico y el peso de las pollitas (*)
|
Sistema de corte |
Longitud del pico a 30 semanas |
Peso vivo, a 20 semanas, kg |
|
|
superior |
inferior |
||
|
CC |
1,74 ab |
1,27 c |
1,56 ab |
|
IR/27/44 |
1,86 b |
1,27 c |
1,55 ab |
|
IR/27/48 |
1,78 ab |
1,21 bc |
1,61 b |
|
IR/27/52 |
1,78 ab |
1,14 ab |
1,55 ab |
|
IR/25/44 |
1,73 ab |
1,19 bc |
1,46 a |
|
IR/25/48 |
1,73 ab |
1,10 ab |
1,67 a |
|
IR/25/52 |
1,67 a |
1,08 a |
1,52 ab |
(*) Las cifras de la misma línea seguidas de una letra distinta son significativamente diferentes (P < 0,05)
Fig. 1. Desperdicio de pienso a 20 y 30 semanas de edad.
Fig. 2. Proporción de aves beniendo a 5 semanas de edad.
Fig. 3. Proporción de aves bebiendo a 10 semanas de edad.
Fig. 4. Proporción de aves picando las plumas a 5 semanas de edad.
Fig. 5. Estado del plumaje en una escala de 1 a 5 (el más alto, el peor).
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